Caisse d'Épargne: jóvenes contra la crisis (y II)

domingo, 30 de noviembre de 2008

30 de Noviembre, Arueda.com

El capítulo de fichajes resulta de gran interés para cualquier aficionado al ciclismo. Caisse d’Épargne ha realizado fichajes prácticamente de videojuego: aprovechando su privilegiada posición dentro del ciclismo (estructura asentada en la élite mundial) y una plantilla de garantías (con un líder como Alejandro Valverde y ciclistas como Óscar Pereiro, José Iván Gutiérrez ó Joaquim Rodríguez en la segunda fila, entre otros muchos), también condicionado por aquellas adversas condiciones económicas a las que hacíamos referencia en la primera parte del artículo, Eusebio Unzué ha decidido apostar por hacerse con jovencísimos talentos de sueldo ínfimo y posibilidades infinitas.


Y es que no cabe duda: los cuatro fichajes son auténticos ‘rara avis’ del ciclismo, corredores tan sumamente polivalentes y avasalladores en su categoría que dan lugar a infinitas cábalas y comparaciones elogiosas. Se trata de mirlos blancos, de estrellas en ciernes, corredores con clase, ilusión y una actitud en carrera agresiva y espectacular. Todos con menos de 23 años y poca experiencia en profesionales. Por explotar.

De entre ellos, el más inusual por su procedencia es el costarricense Andrei Amador. Su segundo apellido, Bipkazacova, delata el origen ruso de su madre y añade aún más singularidad a su ADN. Llegó a España un 29 de enero de hace dos años, aunque medio antes estuvo a punto de llegar para enrolarse en el Viña Magna-Cropu continental de aquellos entonces como stagiaire; asuntos de mánager lo impidieron. Sin embargo, finalmente arribó a las filas del equipo amateur navarro Lizarte (filial de facto de Caisse d’Épargne), donde ha competido dos temporadas que sólo se pueden calificar de fascinantes. Ha ganado casi todo lo que ha querido, de todas las maneras. Escalador notable, buen velocista, tiene cierta falta de fondo comprensible por su edad. Si no se tuerce por el camino, llegará a ser un grande, sin duda será el mejor ciclista de la historia de su país.

De Portugal llega la mejor promesa surgida en el país vecino desde que un desconocido mozo de 23 años llamado Sergio Paulinho saltara a la palestra con la plata olímpica en Atenas tras el inconmensurable Bettini. Rui Costa, 22 años, procedente del Benfica, apunta altísimo; lideró durante esta temporada a la selección portuguesa hacia la victoria en la Copa de las Naciones sub 23, con pocos triunfos pero sí con puestos de honor de todo tipo. Aunque si llamó la atención en algún momento puntual, fue con aquel impresionante quinto lugar en la general final de la Clásica de Alcobendas: un corredor tan joven capaz de acabar Navacerrada con los mejores es, sin duda, un corredor especial. Rui Costa lo es, un escalador que pinta como futuro dominador de grandes vueltas, capaz de adaptarse a las clásicas.

De Francia llega el menos resonante de los cuatro refuerzos, Arnold Jeannesson. Se trata de un buen escalador, podio del Tour del Porvenir, que según su propio director de esta temporada en Auber 93 debería haberse quedado uno ó dos años más en el modesto equipo continental francés para acabar de formarse. Sin embargo, no parece que sea demasiado pronto para firmar por un equipo grande como Caisse d’Épargne, que podría darle un calendario más sencillo donde coger experiencia y mejorar,

Por último, llega también el cántabro Ángel Madrazo. Y llega con polémica, agria: desarrolló sus apenas dos años de amateur en el filial del desafortunado equipo Pro Tour Saunier Duval, incluso a finales de la temporada pasada corrió con el ya por aquel entonces denominado Scott-American Beef en calidad de stagiaire… y, ante la fehaciente posibilidad de que la estructura capitaneada por Joxean Fernández Matxin no pudiera salir a las carreteras el próximo año, optó por dejarla (tal vez faltando a su palabra, no está claro) para firmar con Caisse d’Épargne. Esto dio lugar a un cruce de declaraciones en medios especializados como Biciciclismo.com ó Meta2Mil que, sin duda, no lleva a nada bueno.

Ángel ha protagonizado una de las carreras amateur de los últimos años; sirva como muestra su victoria en la quinta etapa del Circuito Montañés, aún sin los veinte años cumplidos, esta misma temporada. En sus carreras profesionales se ha mostrado como un ciclista agresivo, sin complejos, capaz de atacar en cualquier momento echando mano de unas cualidades excelentes rodando y escalando que, sin duda, le pueden convertir en uno de los grandes ciclistas españoles de la década.

Únase estas cuatro joyas en potencia con el ya de por sí interesante grupo de jóvenes que atesora Caisse d’Épargne: el colombiano Rigoberto Urán, el francés Mathieu Perget (este año explotará), los murcianos Rojas y Luis León Sánchez ó el navarro Imanol Erviti parecen ciclistas capaces de conformar la columna vertebral del equipo en un futuro. La misma que ahora mismo forman los ya citados Valverde, Pereiro, Gutiérrez, Rodríguez… más los clásicos Lastras, García Acosta, Arroyo…

Caisse d’Épargne lleva años siendo el mejor equipo ciclista de España, o al menos el segundo tras la desaparecida estructura de la ONCE de Manolo Sáiz. Este mercado de invierno, sus movimientos han ido en la línea de asegurar el futuro ante la imposibilidad de pagar un presente (se habla de que Contador no ha recalado en la escuadra por la imposibilidad de asumir su salario). Y no parece que la jugada vaya a salir mal.

> Primera parte

Caisse d'Épargne: jóvenes contra la crisis (I)

sábado, 29 de noviembre de 2008

29 de Noviembre, Arueda.com

Económicamente vivimos malos tiempos. Factores muy diversos, que en España orbitan en torno a la burbuja inmobiliaria y a nivel global sobre un liberalismo que se ha confundido con descontrol, han empujado a todo Occidente (Oriente es otra cosa) a una crisis financiera que por global se puede calificar como de grandes proporciones. Y, como en toda crisis financiera, los primeros afectados son los bancos. Problema grave, sobre todo si tu sustento es precisamente un banco. Problema grave se ha encontrado, en efecto, el mánager del equipo Caisse d’Épargne Eusebio Unzué.


El grupo Caisse d’Épargne es una entidad financiera francesa que funciona como una especie de cooperativa, al estilo de la Caja Rural española, aunando a las cajas de ahorro regionales de dieciocho departamentos franceses. Cuenta en su accionariado con otras entidades financieras de sobra conocidas en el ciclismo como Credit Lyonnais (patrocinador del maillot amarillo del Tour de Francia) ó Crédit Agricole (patrocinador del equipo ciclista dirigido por Roger Legeay hasta este mismo año). Posee unos fondos propios de unos 20.000 millones de euros, lo cual dota al grupo de una gran solidez…

… Aún y a pesar de los múltiples desfalcos que han sufrido en los últimos años tanto él como sus asociados. Y es que Caisse d’Épargne sufre precisamente de los mismos problemas que muchas otras financieras de todo el mundo: el hecho de que los bancos posean acciones de otros bancos provoca que los problemas de uno de ellos sacudan al resto, con una especie de efecto dominó.

Así, el caso Societé Genérale de principios de 2008 (4.900 millones de euros desaparecieron del mapa fruto de una pésima gestión) afectó seriamente al grupo que nos ocupa, aunque el golpe de gracia llegara hace poco más de un mes con la pérdida de 600 millones de euros emboscados en las terribles jornadas bursátiles vividas en el mes de Octubre, y que acabaron con la intervención del gobierno de Nicolas Sarkozy para precipitar el cese de la cúpula directiva del banco.

A estas circunstancias empresariales ha tenido Eusebio Unzué que adecuar las deportivas. La economía ha impuesto recortes, y el navarro se ha adaptado a ellas prescindiendo de cuatro corredores consagrados, hechos, que daban resultados, para apostar por jóvenes mirlos blancos, por cuatro menores de 23 años cuyo potencial no tiene techo a la vista.


El capítulo de bajas comienza por Vladimir Karpets, aquel ciclista que fichara cuando el equipo aún se sustentaba en Banesto y que tan buen rendimiento ha dado a lo largo del tiempo a la estructura, a pesar de una cierta indefinición con respecto a cómo aprovechar sus características. Sus resultados esta temporada, sin embargo, no han sido del todo buenos; se respiraba un cierto descontento con respecto a él desde el equipo. Las dos partes han acordado que lo mejor era terminar con un ciclo fructífero para ambas, y Karpets recalará el año que viene en el heredero de la estructura Tinkoff, el reforzadísimo Katusha…

… Equipo multicultural y a priori caótico que también acogerá en su seno a otra baja del equipo Caisse d’Épargne, Joan Horrach. El deianenc (natural de Deià, un pueblo mallorquín) entró en la estructura como parte de la cuota étnica impuesta por el patrocinio de las Islas Baleares en 2004, pero se ganó continuar gracias a sus cualidades. Es un oportunista nato, con buenísimas cualidades para cualquier terreno y capaz de todo cuando tiene el día inspirado. Pesa en su contra el hecho de que sienta poco apego por el deporte de la bicicleta.

El tercer descarte es uno de los hombres más cuestionados de siempre, José Rujano. Clase pura para la escalada aliñada con una actitud que oscila con demasiada frecuencia entre lo bueno y la pura desidia. Después de tres años (Quick Step, Unibet y Caisse d’Épargne) donde su rendimiento apenas se ha correspondido con el de 2005, cuando fuera capaz de ganar la ‘maglia verde’ y acabar tercero en el Giro, sigue encontrando destino gracias a sus condiciones innatas. El año que viene será Flaminia donde evolucione, tras una temporada donde ha completado unos decentes Giro de Italia y Vuelta a Alemania … que sin embargo no llegan a compensar su elevado caché.

Por último, deja Caisse d’Épargne el ex pistard Fabien Patanchon, que no ha cumplido en ningún momento las expectativas creadas: donde se esperaba un corredor nervioso, con un buen tren en llano y capaz de pasar la media montaña, se ha encontrado un corredor débil para afrontar un calendario Pro Tour. Es por ello que se le destinó a una serie de pruebas de menor enjundia donde no ha acabado de mostrar su valor real; entre otras cosas por lo [demasiado] dispersos que han estado sus días de competición. A día de hoy, no tiene equipo para la próxima temporada.

En una próxima entrega, análisis de las altas del equipo Caisse d’Épargne

Presentación de los equipos españoles 2009

viernes, 28 de noviembre de 2008

Al igual que el año pasado, estos meses de diciembre y enero voy a dedicarme a hacer presentaciones de las plantillas de los equipos españoles profesionales, fijándome especialmente en las altas y las bajas de los mismos. Hago este post con el mero objetivo de que sirva como recopilatorio de los mismos.


Caisse d'Épargne: jóvenes contra la crisis (I)
Caisse d'Épargne: jóvenes contra la crisis (y II)


Euskaltel: Cuando todos reman en la misma dirección



Andalucía: Mejorando paso a paso

Marginado con final feliz

viernes, 14 de noviembre de 2008

Vuelve al profesionalismo Aketza Peña


"Encontrar equipo a día de hoy es un triunfo". No hay duda, y más cuando has dado positivo hace algo más de un año, saliendo indemne gracias a tretas legales urdidas por el antiguo presidente de la ACP, ex ciclista y abogado José Rodríguez.

El 30 de Mayo de 2007 fue el inicio de su historia, o calvario. Estaba compitiendo en el Giro de Italia, llevando a cabo una actuación más que decente, presente en carrera, subiendo con soltura. En definitiva, capaz. Pero entonces saltó la liebre: positivo por nandrolona en la primera etapa del Giro del Trentino, Euskaltel le retiró de la carrera y prácticamente del ciclismo. Le despidieron y dejaron de apoyarle. Casi le enterraron.

Tenía en aquellas fechas 26 años y un bagaje relativamente corto. Debutó como profesional en 2004, con un calendario a caballo entre España y Francia. En la Euskal Bizikleta'05 fue tercero en la general tras Eladio Jiménez y Adrián Palomares, gracias en gran parte a una fuga en la segunda etapa. Comenzó a ganar galones de joven promesa, y al año siguiente sólo un Vinokourov encendido le impidió estrenar su palmarés. Fue en la última etapa de la Vuelta a Castilla y León, en un final que picaba hacia arriba, donde atacó con acierto a un kilómetro de meta y burló al gran grupo... de donde saltó Vinokourov, que le rebasó y dejó su serio ataque en un juego de niños. Finiquitó el año con unas prestaciones decentísimas en la Vuelta a España, con presencia en las fugas y trabajo en favor de Samuel Sánchez.

Y en 2007, hasta que saltó el positivo, había realizado una aproximación muy buena a la 'corsa rosa': calendario exclusivamente italiano para acostumbrarse al ritmo de competición, y no era para menos ya que era el líder para la general junto a Dioni Galparsoro. Todo roto cuando saltó el positivo, todo se ha vuelto a ensamblar con la exención de su pena y su fichaje por el modesto conjunto portugués Cartaxo; empresa en la que reconoce haber sido ayudado por el nunca suficientemente reconocido gregario José Antonio Garrido.

No voy a valorar si fue justa o no esa excención, porque no sé si el de Zalla es culpable ó no. Y sinceramente no me interesa demasiado: tengo una forma de ver el ciclismo donde el dopaje es una regla del juego. Inherente. Sólo pienso en que fue un marginado más, por sus rectores de Euskaltel y por extensión por todo el mundo ciclista. Como todos aquellos que dan positivo y son repudiados por todos los estamentos acto seguido.

Su caso, sin embargo, ha tenido final feliz. Aketza no se ha resignado, demostró que no se podía demostrar que era culpable, intentó saltar al ciclocross cuando no tenía equipo... En definitiva, luchó contra la marginación. Su caso, paradigmático, tiene final feliz.

Nota de edición El artículo parte de una buena idea, pero no he sabido consumarla y creo que tampoco la he expresado en condiciones

Se retira la Identidad. Se retira Paolo Bettini

jueves, 6 de noviembre de 2008

Primera parte en Arueda.com
Segunda parte en Arueda.com

Paolo Bettini se retira. Once temporadas como profesional, sesenta y siete victorias, una condición de superclase más que demostrada dentro y fuera de la carretera. Clasicómano, avasallador cuando quería, capaz de convocar a un equipo entero en torno a su figura, carismática como pocas. Aunque si se puede definir a Bettini con una palabra, ésa es Identidad.


Nació en Cecina el primero de Abril de 1974; nació para el ciclismo dieciséis años después, cuando comenzó a pedalear en la categoría juvenil. Se presentó como fue durante toda su vida deportiva: físicamente pequeño, ágil y habilidoso sobre la bicicleta, nervioso, atacante nato y capaz de poner patas arriba una carrera demarrando en el lugar más inaudito. Fue entonces cuando le adjudicaron el sobrenombre de ‘Grillo’, que le siguió de nuevo durante toda su vida deportiva.

Si se puede definir a Paolo Bettini con una sola palabra, ésa es Identidad, y ya lo empezaba a demostrar en aquellos tiempos. Cuando en 1997 firmó con GB-MG, curtido ya en el selectivo calendario ‘dilettante’ italiano, Michele Bartoli sabía lo que se llevaba. Quería formar una nueva versión de sí mismo, veía en Bettini al mismo corredor que era él en sus inicios: uno de tantos ciclistas italianos rapidillos, capaces de pasar los puertos en cabeza y atacar en cualquier momento. Pero con una chispa especial, brillo, la capacidad de hacer de cada triunfo un triunfo para el recuerdo. Clase.

Bartoli era por aquel entonces la gran estrella italiana junto al mítico Marco Pantani. Profesional desde el 93, figura desde aquel Tour de Flandes que venció en el 96 con una superioridad absoluta respecto al resto de ciclistas. Por no hablar de la Lieja’97, ganada por aplastamiento sobre un Jalabert incapaz de seguir un último ataque progresivo y brutal. Bartoli era un genio, era Ego puro, no quería trabajar para nadie porque se sabía ganador donde quisiera ganar.

Llevó consigo a Bettini, como el maestro que lleva consigo al alumno, para enseñarle y recibir valiosas ayudas. Ficharon juntos por Asics; Paolo fue una pieza clave en la exhibición del equipo camino de Schio, cuando Bartoli puso en jaque el Giro de Italia y ganó la etapa a la par que entregaba la ‘maglia rosa’ a su compañero Andrea Noe’. El Grillo acabaría séptimo aquel Giro, apuntando unas facetas de vueltómano que jamás llegaría a explotar de verdad.

Siguieron su trayectoria compartida, esta vez en Mapei. Y fue aquí cuando alumno y maestro empezaron a chocar, cuando surgió la Identidad a la sombra del Ego. En la Lieja-Batogne-Lieja de 1999, mientras Vanderbroucke asombraba al mundo ciclista anotándose la ‘Doyenne’, Bartoli fue cuarto. Diez segundos después entraba Bettini, quinto. El alumno, aún a unos pasos del maestro, pedía paso. Y se lo dio un grave accidente de Bartoli en la Vuelta a Alemania de 1999, que le mantuvo alejado de la bici durante el tiempo suficiente para no llegar a tiempo a la primavera de 2000…

… Y entonces la Identidad fue capaz de que un equipo entero de ciclistas de clase mundial se limitara a trabajar en pos suya. Johan Musseuw, Andrea Tafi, Giuliano Figueras, Axel Merckx; todos condujeron la carrera de manera que, en los momentos decisivos, Paolo Bettini estuviera en la pomada. El Grillo no falló, y se impuso en Ans sobre un sorprendente David Etxebarría y Davide Rebellin.

Dos años después, Bettini volvería a reinar en Lieja. De nuevo Mapei se vació por él. Esta vez, fue un magnífico Stefano Garzelli quien le llevó en volandas hasta meta, cediéndole la victoria en la última pedalada. Ambos entraron, brazos en alto, efectuando uno de los dobletes más impresionantes que se recuerdan. Tercero fue un bisoño Iván Basso que, vestido de Fassa Bortolo, empezaba a asomarse.


También corrió aquella Lieja vestido de Fassa Michele Bartoli. Acabó 59º, a 3.55 del Grillo. De alguna manera, su Ego debió arrodillarse ante la Identidad tras negarse a hacerlo aquel invierno, rescindiendo su contrato con Mapei por tal de no aguantar el verse supeditado a la voluntad de un Bettini a quien había repudiado en las Olimpiadas de Sidney’00 por no vaciarse en su favor para cazar al grupo de Jan Ullrich, a la postre oro. Divorcio entre alumno y maestro, que años después se volvieron a reconciliar para siempre.

Después de aquella segunda Lieja victoriosa, Bettini se convirtió definitivamente en gran estrella mundial. En 2003 ganó Milán – San Remo burlando gracias a Paolini el rodillo que era aquel año el Domina Vacanze de Mario Cipollini, además de la Clásica de San Sebastián y la HEW Cyclassics de Hamburgo. Como postre, se llevó la Copa del Mundo que ya ganara el año anterior y que ganaría de nuevo al siguiente. Venció el Giro de Lombardía en 2005 y 2006…

¿Asignaturas pendientes para el alumno por aquellos entonces? Dos. Las clásicas de pavé y aquel Mundial que se resistió siempre a su maestro. En el pavé no llegó a intentarlo seriamente: corrió varios Tour de Flandes sin fortuna, y en París – Roubaix jamás llegó a correr, sabedor de que su fisonomía no es la más adecuada para el cruel adoquinado francés y de que en su equipo siempre ha habido gente mejor que él para ese terreno.

Los Mundiales fueron otra cosa. A pesar de que Bettini se impuso varias veces en el ránking UCI, que nombraba al mejor corredor del año, y en la Copa del Mundo, que premia al mejor clasicómano, nunca se había ganado el derecho a portar el maillot arco-iris que lo acredita como tal, que sólo se consigue en la carrera más grande del año. Hasta 2006, cuando en Salzburgo aprovechó una arriesgada maniobra de Samuel Sánchez, que cortó el grupo en un pequeño descenso a 500 metros de meta, para conseguir la victoria sobre Valverde y Zabel. Lo celebró en el podio, subido en brazos de los otros dos medallistas. La Identidad le ganó el respeto de todo el pelotón, y aquella imagen lo demostraba.

Era un cabecilla, un hombre admirado por el resto de ciclistas a la par que odiado por aquellos que aparentan luchar por su bien, pero luchan por otros intereses. Fue el único con las suficientes agallas de no firmar el canallesco código ético de la UCI. Se rumorea que dejó de correr en Francia (ningún día de competición en territorio francés desde la París-Tours de 2004) para no sufrir las persecuciones de ciertos mandatarios que le tienen ganas. El año pasado, cuando ganó el Mundial de Stuttgart, hizo gestos de disparo durante su celebración. Fue su reivindicación ante la deplorable campaña en su contra puesta en marcha por los medios alemanes. Siendo él mismo, no estuvo quieto cuando vio pisoteada su Identidad.

Este último año, las cosas no han acabado de irle bien. Tres triunfos menores para alguien de su escalafón y dos etapas en la Vuelta a España (aunque no se haya dicho hasta ahora, es uno de los pocos corredores en activo que ha ganado al menos un parcial en las tres grandes) no parecían suficiente como despedida. Pura Identidad, se tenía que despedir a lo grande; y lo hizo en casa, en el Campeonato del Mundo de Varese, y consiguiendo que todo el pelotón danzara al son de sus tambores y pedaleara a su ritmo en señal de respeto, o de duelo.

Por enésima vez: si se puede definir a Paolo Bettini con una sola palabra, ésa es Identidad. Siempre ha sido igual, nunca se ha escondido a menos que fuera una manera de revindicarse o que realmente no pudiera más. Paolo nunca ha dejado de dar un paso al frente, nunca ha dejado de sorprender y nunca ha dejado de pedalear. E incluso ahora que se retira, es difícil no imaginárselo sobre una bicicleta y en cabeza del pelotón.

Haciendo balance con CQ

sábado, 1 de noviembre de 2008


Cycling Quotient

No se me ocurre mejor manera de ponerle colofón a la temporada, mejor manera de hacer un resumen, que observar Cycling Quotient y deducir a partir de él. Empezamos por el ránking individual absoluto...

Ránking individual a día 1 de Noviembre de 2008

1. Alejandro Valverde
2. Alberto Contador
3. Davide Rebellin
4. Cadel Evans
5. Damiano Cunego
6. Fabian Cancellara
7. Levi Leipheimer
8. Philippe Gilbert
9. Alessandro Ballan
10. Kim Kirchen
11. Tom Boonen
12. Carlos Sastre
13. André Greipel
14. Óscar Freire
15. Robert Gesink

Los quince mejores del mundo. Es prácticamente un hecho que Alejandro Valverde, con sus doce victorias de prestigio, ha sido el mejor ciclista de la temporada; también que Contador, con dos grandes vueltas, no le ha andado a la zaga. CQ tiene razón, esto deriva de que se basa en la lógica. Sólo chirría la ausencia en el Top15 de Stijn Devolder y Mark Cavendish, dos de las sensaciones de la temporada; lo mismo se podría decir de Frank Schleck, a quien su nulo tercio final de temporada le pasa factura en el ránking.

Ránking por equipos a día 1 de Noviembre de 2008

1. CSC
2. Columbia
3. Quick Step
4. Caisse d'Épargne
5. Astaná
6. Liquigas
7. Silence - Lotto
8. Gerolsteiner
9. Rabobank
10. Lampre
11. Française des Jeux
12. Crédit Agricole
13. Bouygues Telecom
14. Cofidis
15. AG2R
16. Euskaltel - Euskadi
17. Barloworld
18. Garmin - Chiplote
19. Milram
20. LPR
···
24. Scott / Saunier Duval
28. Karpin - Galicia
36. Contentpolis - Murcia
47. Andalucía - Cajasur
57. Extremadura
68. Burgos Monumental
95. Orbea

El ránking mundial por equipos es para CSC, por delante del potentísimo Columbia y del belga Quick Step. Precisamente en este último está mi única queja: ¿ha sido la temporada de Quick Step superior a la de Caisse d'Épargne? En mi opinión, no; la presencia del equipo hispano-francés en las granes vueltas ha sido mucho mayor que la de Quick Step, que sólo se ha mostrado superior a Caisse en las clásicas de pavé (en este caso, también a cualquier otro equipo) y en los sprints. En las clásicas de cotas la balanza se inclina nuevamente en favor de Caisse.
Dato nacional para la preocupación: de los cinco peores equipos de categoría profesional, dos son españoles. Se trata de Andalucía y Extremadura, que según CQ han estado al nivel del BMC estadounidense, el Volsbank austríaco y el PSK checo. Había mimbres para más y la cosa no ha funcionado. Extremadura se ha visto abocado a la desaparición tras subsistir devorándose a sí mismo, mientras Andalucía ya ha dado un paso adelante para mejorar su nivel con los fichajes de Tondo, Vicioso y Calvente.

Hipotético ránking español

1. Alejandro Valverde
2. Alberto Contador
3. Carlos Sastre
4. Óscar Freire
5. José Joaquín Rojas
6. Joaquín Rodríguez
7. Samuel Sánchez
8. Ezequiel Mosquera
9. Mikel Astarloza
10. Luis León Sánchez
11. Héctor Guerra
12. Iván Gutiérrez
13. Gustavo César Veloso
14. Koldo Fernández de Larrea
15. Juan Antonio Flecha

En el ránking español de la temporada llama la atención ver a Samuel Sánchez, campeón olímpico y con ínfulas de ser el cuarto de España, el séptimo. Uno de los grandes nombres, Óscar Pereiro, es 64º, 494 del mundo. Su temporada, finalizada prematuramente debido a la escalofriante caída en el Tour, no ha dado para más.
El primer ciclista no Pro Tour es el gallego Ezequiel Mosquera; queda reflejada así su enorme temporada, desde el principio hasta el final del calendario. Tras él, Héctor Guerra y un Gustavo César aupado ahí por su victoria en la devaluada Volta a Catalunya.

Ránking español sub 25

1. José Joaquín Rojas
2. Luis León Sánchez
3. Igor Antón
4. Sergio Pardilla
5. Daniel Navarro
6. Imanol Erviti
7. Javier Moreno
8. Gonzalo Rabuñal
9. Eduardo Gonzalo
10. Óscar Pujol
11. Mikel Nieve
12. José Herrada
13. Francisco Javier Aramendia
14. Diego Milán
15. Arkaitz Durán

Entre los españoles de 25 años o menos domina el murciano José Joaquín Rojas, poco reconocido por un calendario desarrollado mayormente fuera de nuestras fronteras (sólo 11 días de competición en España). Aparece cuarto el protagonista del mayor culebrón invernal, Sergio Pardilla, quien parece recalar finalmente en Teltek-H2O a falta de un nuevo giro en la historia. Destacable el octavo puesto de Gonzalo Rabuñal, que con sus buenas actuaciones en Asturias (6º) e Irlanda (8º) se sitúa entre los mejores de su generación. Con 24 años, no es descabellado situar sus límites cercanos a los de Mosquera...