Euskaltel: Cuando todos reman en la misma dirección

martes, 30 de diciembre de 2008

30 de Diciembre, Arueda.com

Euskaltel ha sido el equipo que más ha evolucionado en los últimos cuatro años en el pelotón español, a pesar de que los datos no acaben de reflejarlo. La escuadra gestionada en los despachos por Miguel Madariaga ha pasado en poco tiempo de reflejar el carácter de Julián Gorospe, aquel corredor brillante a ratos que dejaba la sensación de falta de experiencia incluso en los últimos años de su carrera, a ser un espejo de aquel Igor González de Galdeano tozudo y robusto que mantenía el rendimiento máximo aconsejable mientras aguantaran sus piernas y su corazón.


No sólo ha sido un cambio de métodos preparatorios, que también, sino una permuta de actitudes. En el primer campo, se han racionalizado los calendarios: el ciclista corre pruebas que se adaptan a sus características, perdiéndose un poco el dogma de que “compiten los que más en forma estén”, algo que mermaba al esforzado de la ruta que perdía chispa e incluso motivación. En el segundo apartado, Igor Galdeano impuso un orden en el barco de Euskaltel. Aquello que era el ejército de Pancho Villa según algunos cronistas, aquello donde no se observaba trabajo de equipo, se arregló en base a una filosofía de cerrar filas en torno a un objetivo requiera lo que requiriese el mismo.

Se cumplen ya cuatro años desde que Igor tomara el mando del barco, se nota en la carretera aunque los resultados no acaben de dar la razón. Para el recuerdo queda aquel magnífico Tour'07, o esta última Vuelta a España donde Igor Antón fue llevado en volandas por sus compañeros (aspirando a todo) hasta que una caída desbarató las ambiciones de un equipo, de unos corredores que reconocían en la prensa estar huérfanos sin un objetivo, lejos de encerrarse en aquel conformismo y casi egoísmo pretérito.

Esa línea, ese barco donde todos reman en la misma dirección, se intentará seguir este año. Para ello, se ha prescindido de seis hombres que seguramente no han rendido lo esperado. Beñat Albizuri (lanzador aceptable al que tal vez le faltó motor para correr en Euskaltel), Lander Aperribay, Jon Bru (buen ciclista que no se encontró cómodo en un equipo grande), y Antxón Luengo dejan Euskaltel camino del retiro profesional. Dioni Galparsoro, ciclista de gran calidad pero poca cabeza, ficha por Conténtpolis-Ampo, donde demostrará ser muy válido para el ciclismo una vez se encuentre en un entorno de menor presión y junto a uno de sus mentores, Óscar Guerrero.

Capítulo aparte merece la baja de Haimar Zubeldia, posiblemente una representación viva del antiguo carácter imperante en el equipo. Ha vivido un tanto acomodado, sabiéndose líder indiscutible en aquellas carreras que tomase por objetivos; no ha sacado provecho de su clase, que si bien no es fabulosa sí es suficiente para entrar entre los cinco primeros de Tour o Vuelta. Emigra al Astaná de Contador, donde deberá plegarse ante otros ciclistas mejores que él y trabajar, asumiendo un rol que lleva mucho tiempo sin desempeñar y al que tal vez le cueste adaptarse.

En cuanto a las altas, serán tres incorporaciones hechas con lógica. Suben dos corredores del filial continental de Euskaltel, ese prolífico Orbea que se gana con sus frutos la continuidad en las carreteras y ratifica el acierto de la Fundación Euskadi de disponer un equipo puente donde pulir las joyas de la cantera vasca antes de dar el gran salto al Pro Tour.

El primero de estos dos promocionados de Orbea es Mikel Nieve, que casi desde Junio ya se sabía ascendido y ha seguido rindiendo a buen nivel. El navarro es un todoterreno, rodador aceptable que encuentra su mejor hábitat cuando la carretera pica hacia arriba y que tiene en la punta de velocidad su principal defecto. A sus 24 años tiene mucho margen de progresión, pudiendo llegar a ser un ciclista bastante importante en un futuro. Por el momento, esta temporada ha demostrado sus cualidades con puestos destacables para un neo en carreras como la Klásika Primavera (12º), GP Miguel Indurain (14º), Euskal Bizikleta (12º) ó Vuelta a Madrid (14º)

El segundo, llegado al equipo naranja a mediados de octubre para cumplir la normativa UCI que establece el mínimo de corredores por equipo Pro Tour en 23, es el alavés Sergio De Lis. Se trata de un rodador potente, buen pistard en su día, que da lo mejor de sí mismo en las contrarrelojes, con lo que cubre un perfil poco habitual en Euskaltel. Con Orbea, y a sus 22 años, ha sido líder dos etapas en el Circuito Montañés (para algunos expertos, la mejor prueba amateur de España).

El otro fichaje es el navarro Pablo Urtasun, que debutara en profesionales de mano de Óscar Guerrero en el desaparecido Kaiku y que estas dos últimas temporadas corriera en el Liberty portugués. Urtasun es un sprinter potente, algo brusco y reciclado en los últimos tiempos al rol de lanzador de dos velocistas de mayor cartel: el ídolo portugués Cándido Barbosa y el emergente Manuel Cardoso. Su cometido en Euskaltel será precisamente el de lanzador de Koldo Fernández de Larrea. A buen seguro realizará una labor más que digna.


Merece la pena partir de estas últimas altas para comentar la que puede ser dirección deportiva que tome Euskaltel la temporada que viene. Se ha reforzado el último punto débil del equipo, los rodadores; se ha rodeado al 'pichichi' del equipo, Koldo Fernández de Larrea (seis de las ocho victorias del año pasado corrieron a su cargo), un hombre al que sólo le faltaba un coequipier de garantías para poder dar el gran salto de calidad y enfrentarse a los mejores sprinters del mundo en igualdad de condiciones. Aparte, es presumible que el equipo girará en torno a un Samuel Sánchez que preparará con mimo las clásicas de primavera y la Vuelta a España, donde irá a por la victoria final. Para el Tour, serán Mikel Astarloza e Igor Antón quienes llevarán los galones.

Por otra parte, es de esperar que ciertos hombres del equipo den un paso al frente e incluso estrenen su palmarés. El potentísimo Markel Irízar, que rozara la victoria en el prólogo de la París-Niza, y su compañero de hornada Gorka Verdugo, no deberían resignarse a ser meros hombres de equipo y podrían jugar sus propias bazas en algunas pruebas menores. Combativos como Alan y Rubén Pérez son candidatos claros a la victoria en escapadas que lleguen a meta, dado que han adquirido la experiencia suficiente como para poder rematar sus cabalgadas con éxito. Por último, es exigible un mayor rendimiento de Iñigo Landaluze, completísimo aunque algo gris este año; y de Iván Velasco, que puede ser un corredor importante para el futuro si pierde el miedo a dejarse ver en cabeza.

No faltan mimbres en Euskaltel para hacer una buena temporada 2009. Es indudable que un equipo con un mercado tan limitado jamás podrá competir con las mejores estructuras del mundo en verdadera igualdad de condiciones. Sin embargo, sí que se pueden mejorar los resultados que se vienen cosechando de un tiempo a esta parte, algo pobres si comparamos los datos con los de otras escuadras Pro Tour. Y para esto hace falta tener un objetivo claro y, entonces.... unir fuerzas para conseguirlo. Remar todos juntos hacia el mismo horizonte.

Buenos profesionales sin equipo (y II)

sábado, 27 de diciembre de 2008

Segunda parte: cinco [más uno] nombres jóvenes
Arueda.com

Continuamos con el reportaje sobre los buenos ciclistas sin equipo que hay en España, centrándonos esta vez en los jóvenes.


Raúl Alarcón (1986, Alicante) A sus 22 años ya ha reunido experiencia durante dos temporadas completando el exigente calendario Pro Tour que le planteaban en Saunier Duval. En él, ha demostrado muchísima fortaleza (apenas siete retiradas en cien días de competición, coeficiente muy bueno para un sub 23) y ciertas cualidades como rodador. No en vano, ha sido capaz de terminar dos París-Roubaix, algo de lo que no pueden presumir muchos ciclistas españoles. Por lo pronto, y en espera de una oferta parra continuar en la categoría reina del ciclismo, se ha recalificado con el Comunidad Valenciana amateur.

Francisco Javier Etxarri (1986, Navarra) Como Alarcón, lleva dos temporadas en el profesionalismo; sin embargo, ha completado un calendario mucho más suave, lo cual se nota en los resultados. Tras un primer año de adaptación en el difunto Grupo Nicolás Mateos de José Luis de Santos, esta última estación ha corrido en Conténtpolis-Murcia acumulando hasta cinco puestos entre los quince primeros en pruebas de nivel como la Vuelta a Murcia. Resulta incomprensible que un escalador de gran calidad y mayor futuro como él aún no haya encontrado hueco en la élite de ciclismo. Se rumorea de él, por otra parte, que Eusebio Unzué le tiene en su cartera para Caisse d'Epargné desde hace mucho tiempo.

José Vicente Toribio (1985, Ciudad Real) Debutó en 2008 con Burgos Monumental, avalado por su asiduidad en las convocatorias de la Selección Española sub 23 y por dos años más que decentes en Caja Rural. Y, en efecto, cumplió lo prometido: como rodador y en las pequeñas subidas, Toribio dio un rendimiento que, si bien no se puede calificar como sobresaliente, sí que fue notable. En carreras de categoría .2 (donde se mezclan profesionales y aficionados) fue donde encontró su mejor hábitat, siendo cuarto en la general final de la Vuelta a Navarra. Estuvo a punto de marchar al equipo americano Rock & Racing junto a su compañero de entrenos Óscar Sevilla, aunque finalmente su conjunto en 2009 será el Andalucía-Cajasur sub 23

Ignacio Sarabia (1983, México DF) Tres años enrolado en el equipo Extremadura-Spiuk le han servido para demostrar su potencia, que asombraba incluso a sus propios compañeros en las concentraciones. Posee una gran polivalencia, siendo capaz de luchar codo con codo con los mejores velocistas en una larga y llana avenida y de batirse al día siguiente con los escaladores en un final en alto. Sólo necesita mejorar su visión de carrera para convertirse en un corredor ganador; sin embargo, para ello le hace falta mantenerse en un equipo de élite...

Alberto Rodríguez (1982, Barcelona) Conoció el profesionalismo en septiembre de 2004 de la mano de Matxin, pasando posteriormente dos años en Massi, uno en Viña Magna y otro (este último) en Conténtpolis-Murcia. Fue en el segundo año en Massi donde mejor rindió, plantando cara a ciclistas de élite en carreras como París-Corrèze ó la Prueba Villafranca de Ordizia. Después, la mala suerte le ha perseguido con caídas y sus correspondientes lesiones, casi siempre en sus mejores momentos de forma. A pesar de ello, su calidad escaladora ha quedado patente ya en varias ocasiones.

Manuel Lloret (1981, Valencia) Entra en este artículo sobre la bocina, tras conocerse hace pocos días el desmantelamiento del que iba a ser su equipo para la próxima temporada, el portugués Cartaxo. Se trata de uno de los mejores contrarrelojistas y rodadores del pelotón, de unas condiciones similares a las de Luis León Sánchez... pero con la progresión cortada gracias a la lacra de la Operación Puerto (ha pertenecido desde siempre a la estructura “maldita” de Vicente Belda), que le ha impedido encontrar hueco en España a pesar de haber ganado una etapa en la Vuelta a Andalucía en su segundo año profesional, una Vuelta a Madrid o el bronce del Nacional CRI. En el agosto pasado corrió la Vuelta a Portugal con Barbot, dando un buen resultado en las contrarrelojes.

Buenos profesionales sin equipo (I)

lunes, 22 de diciembre de 2008

Primera parte: cinco nombres veteranos
21 de Diciembre, Arueda.com

Corren tiempos difíciles en el ciclismo, baja el número de equipos profesionales y también el de corredores en activo. Bajan los patrocinios, suben los problemas burocráticos y los asuntos extradeportivos devoran ilusiones.


España no es ajena a todo esto, aunque por una vez no saldrá demasiado afectada. Este año se mantiene constante el número de estructuras de élite, desaparece Extremadura y a cambio aterriza en la categoría continental Andorra - GrandValira. Otras estructuras se han reforzado, como Contentpolis con el patrocinio de AMPO ó el equipo gallego con la entrada de Xacobeo en el presupuesto. No está tan mal el panorama…

… Pero el ciclo sigue. Se promocionan aficionados al profesionalismo, y estos sencillamente ocupan el hueco de los que ya tenían su plaza en temporadas anteriores. En ocasiones pierden dicha plaza con merecimiento: no rinden, o no dan la talla, o las lesiones les martirizan… Y en otras ocasiones la pierden aún habiendo hecho méritos para conservarla.

Los diez ciclistas que presentaremos en el artículo son de este último género: corredores de calidad, buenos trabajadores ó con un futuro inmenso. Los diez ciclistas que presentamos a continuación son lo mejor que hay en el mercado español en este momento, refuerzos incluso de relumbrón en algunos casos para cualquier equipo que decida incorporarlos a su plantilla. Faltan aquí corredores totalmente válidos que bien podrían haber entrado en este artículo, como Gonzalo Zambrano; pero sólo con que los ciclistas reseñados encontraran equipo... se habrían salvado bastantes buenas carreras profesionales.

Rubén Lobato (1978, Madrid) Escalador cuya falta de potencia le penaliza en el llano. Inició su carrera profesional en el seno del Acqua e Sapone de Mario Cipollini en 2001 merced a su amistad con Miguel Ángel Martín Perdiguero. Después de tres años más que decentes, Matxin lo reclutó para Saunier Duval y le dio confianza para trabajar para sí mismo. Luego de unos resultados poco brillantes, le asignó un nuevo rol en el cual se encontró aún más cómodo: gregario. Y este trabajo ha desempeñado durante tres años con solvencia.

Rodrigo García (1980, Cáceres) Cazaetapas de libro, rapidillo y completo. Pasó a profesionales en 2005 con el equipo Kaiku, donde completó dos años en los cuales mostró un gran nivel. Explotó en la siguiente temporada con Fuerteventura-Canarias, donde estrenó su palmarés con dos victorias de etapa en la Vuelta a Asturias. Su rendimiento esta última estación con Extremadura ha sido malo debido a problemas físicos que han venido a sumarse a los estructurales padecidos por el equipo.

Fran Ventoso (1982, Reinosa) Posiblemente uno de los cinco mejores sprinters del año, camino de ser el mejor cuando se retire Óscar Freire... si los problemas extradeportivos no siguen cebándose con él. Muestra además una gran capacidad de adaptación a otros terrenos, lo cual le confiere una gran ventaja respecto a los velocistas puros. Después de cuatro años en Saunier Duval, la pasada temporada fichó por Andalucía-Cajasur, donde completó un año más que correcto (dos victorias de etapa) a pesar de competir por última vez en el mes de Junio.

Koldo Gil (1978, Burlada) Escalador de gran calidad, compañero de promoción de Patxi Vila en el Banesto de 2001. Ha ganado generales de varias vueltas pequeñas y una etapa en el Giro encuadrado en las estructuras más prestigiosas de España: Banesto (2001-02), ONCE / Liberty (2003-05) y Saunier Duval (2006-07). Sin embargo, la situación de marginación encubierta derivada de su presunta presencia en la Operación Puerto ha provocado que no haya encontrado equipo acorde a su calidad ni el año pasado (estuvo en el Liberty Seguros portugués) ni este, donde aún no tiene compromiso.

Josu Mondelo (1981, San Sebastián) Rodador de gran fortaleza y capaz de pasar la montaña, además de columnista en Arueda.com. Empezó su carrera en Portugal (Madeinox, 2005) y la ha desarrollado en la estructura de Extremadura-Spiuk, donde su trabajo como gregario y escapista ha sido de altura. Gracias a su potencia puede rendir también a buen nivel como contrarrelojista, en una faceta poco explotada pero que podriá ser prolífica.

Así será la etapa reina de la Vuelta 2009

martes, 16 de diciembre de 2008

Exclusiva de Arueda.com

Desde Arueda.com tenemos el privilegio de anunciar en exclusiva los principales ingredientes de la etapa reina de la Vuelta a España, que tomará la salida desde el municipio de Berja y terminará en Sierra Nevada… previo paso por el reclamadísimo Haza del Lino.

La etapa tendría su inicio en Berja, pueblo del sureste almeriense de 14.000 habitantes que acogerá por primera vez una salida de la Vuelta a España. Se tomaría una ruta por la costa, desde donde se iniciará la subida al coloso granadino del Haza del Lino. A este respecto se contemplan dos opciones: subir desde La Rábita, lo cual supondría ascender por una vertiente de casi treinta kilómetros de longitud y cerca del cinco por ciento de pendiente media; o bien subir desde Castillo de Baños, que daría pie a una vertiente diez kilómetros más corta pero un dos y medio por ciento más empinada.

Tras el paso por el Haza del Lino, seguro al noventa por ciento, se emprendería camino hacia Sierra Nevada, puerto que se escalaría hasta Pradollano. Entre medias se podría incluir alguna que otra dificultad montañosa, pero éste es un extremo que no ha podido ser confirmado.

El puerto granadino de Haza del Lino es uno de los que más habían reclamado los aficionados para que fuera incluido en la Vuelta a España. Se trata de un puerto de categoría especial y 1302m de altitud y cuya principal característica es que ofrece hasta cinco vertientes distintas, cada una de ellas con kilometrajes y porcentajes medios considerables.

Esta será la etapa reina de la Vuelta Ciclista a España. Junto a ella habrá otras jornadas decisivas ya confirmadas como la Sierra de la Pandera, y otras como el rumoreado paso por Xorret de Catí ó el Alto de Aitana. Amén de etapas muy interesantes, como la llegada a Lieja o los tradicionales trayectos por la Sierra Madrileña. Sin embargo, si habrá una trascendental y representativa sería esta Berja – Sierra Nevada que Arueda.com os adelanta en exclusiva.

La presentación oficial del recorrido de la Vuelta a España 2009 se celebrará el próximo miércoles 17 de diciembre en Madrid.

Aquel Kelme del año 2000

sábado, 6 de diciembre de 2008

Plantilla en CycleBase

Era un equipo que atacaba en el kilómetro uno y no se rendía hasta que se cruzaba la línea de meta. Tácticas desquiciadas: mandamos a los tres segundos espadas del equipo en la fuga para que luego ataque el líder, les coja y le lleven a rueda aunque sea 500 metros. O, si no, defendemos en el Tour el honor español tal y como defendieron las guerrillas de Sierra Morena a la patria en la Guerra de la Independencia frente al invasor francés: pañuelo a la cabeza, cuchillo entre los dientes. A Italia, al Giro, que vayan los escarabajos del equipo; aquellos melones sin abrir, que podían salir buenos ó malos pero se compraban de cuatro en cuatro.

Aquel Kelme del año 2000 fue el que me aficionó al ciclismo, aquellos maillots verdes, blancos y azules tan llamativos y siempre por delante. Aquel director tan simpático, bajito y con malas pulgas de cuando en cuando frente a los micrófonos. Aquel que se acostumbró a ver cómo le "robaban" a sus mejores ciclistas; el último fue Valverde, el primero no sabría decirlo porque seguramente el caso se dio antes de que yo naciera. Porque este equipo, no lo olvidemos nunca, nació en 1982 y vivió durante 24 azarosos años, aunque al final lo hiciera como una especie de esperpento repleto de problemas y ahogado por cierta presión mediática fruto del caso Manzano. Dependiendo, además, del dinero público.


Es un equipo inolvidable, no cabe duda. Y he elegido el de ése año, el Kelme 2000, por ser una muestra de cómo acumular talento sin despilfarro, con una buena política de base y con una táctica que permitiera lucir a todos y cada unos de los corredores en todos y cada uno de los momentos de la carrera. En Kelme, fueran más malos o más buenos, todos tenían un cometido y un momento.

Fernando Escartín era el líder del equipo, y junto a él un Roberto Heras en pleno crecimiento. Camino de una plenitud que se le escaparía entre los dedos por caer en la tentación, por entregarle a Lance Armstrong sus mejores años de vida deportiva a cambio de una gran suma de dinero. Éticamente se podría plantear como un dilema, vender el alma a cambio de cubrir las necesidades del cuerpo para mucho tiempo.

A su vera aparecía la gran promesa del ciclismo español, un Óscar Sevilla que tenía la cara de niño que aún hoy conserva. También estaba un Chechu Rubiera que también pasó el mismo proceso que Roberto Heras, aunque en su caso hiciera mucho cierta predisposición a ser un gregario de primera división antes que un jefe de segunda. Estaba un Aitor González del que pocos se esperaban que fuera capaz de hacer saltar la liebre como lo hizo en aquella Vuelta. Estaba un Quique Gutiérrez del que ninguno esperábamos aquellas exhibiciones en la montaña del Giro'06. Estaba Ángel Vicioso, un prometedor sprinter tan parecido a Jalabert...

También había tipos duros, como los gregarios Vidal, De los Ángeles, Cabello, Francesc León, Pipe Gómez, los dos Pascuales, Toni Tauler. Colombianos de campanillas: Botero, Castelblanco, Cárdenas, Contreras. Promesas que quedaron en nada: Eligio Requejo, Álvaro Forner. Hombres que demostraron capacidad y ganas, aquel Rubén Galvañ que fuera el único ciclista español en acabar la Roubaix'00. También Juanmi Cuenca, a quien sempiternas lesiones le impidieron demostrar las condiciones que atesoraba.

Como en toda melancolía hay tristeza. En el Kelme del año 2000 estaban dos gemelos apellidados Ochoa, que con el paso de los años escribirían [dejarían escritos] uno de los episodios más pasionales del ciclismo español. Estaba un Isaac Gálvez que nos dejó en Gante, que murió y consternó, que sigue todavía consternando. Y también un Manzano maldito, el Árbol de la Ciencia tan triste y mezquino, que tras sus ramas desveló una realidad que no todos queríamos saber y algunos siguen sin creer.

Echo de menos al Kelme, tengo que reconocerlo. Echo de menos a Vicente Belda, que esperó volverá la próxima temporada a los mandos del Boyacá es para Vivirla. Y ojalá los vista de azul, verde y blanco, como si fuera un canto a la nostalgia. Como si fuera este artículo tan divagante que escribí anoche y del que no he querido cambiar ni una coma.